jueves, 16 de agosto de 2007

¡Por favor, ayuden a Joseph Rosario!

Joseph Rosario se pasa los días de su vida en la parte frontal de los periódicos HOY y EL NACIONAL. Allí duerme y hace sus necesidades fisiológicas. Cuando llega la madrugada lo envuelve en su manto frió, y los aguaceros lo mojan sin remedio.

POR JUAN CARLOS NAVARRO
Joseph esta preso detrás de las verjas de estos diarios. Ve pasar el día ante el. Lo vemos moverse afanosamente a cada instante. Tiene más de 15 años de haber llegado al país “deportado” desde Ámsterdam, Holanda y ha solicitado a varios Presidentes dominicanos que intervengan en su caso a fin de que el mismo sea resuelto.

Rosario llego al país, “desterrado” supuestamente por órdenes del entonces secretario de Estado de Justicia de Holanda, Kart Hals Altas, quien argumento que se trataba de un dominicano ilegal.

“Yo soy holandés, yo no soy dominicano” se le escucha decir con frecuencia a Joseph. Lleva 15 años clamando porque su caso sea solucionado. Su foráneo tono de voz parece evidenciar que no es dominicano.

Las autoridades dominicanas deben de iniciar una nueva investigación seria de su caso para que se compruebe que no es dominicano, por lo cual no debe permanecer en territorio nacional contra su voluntad.

Durante 15 años que lleva el apátrida Joseph Rosario en este país ha pasado de todo, desde agresiones físicas hasta la burla de la gente. Duerme actualmente en un callejón al aire libre, por lo cual permanece de pie de noche, cuando llueve, y come cuando los empleados de los periódicos HOY Y EL NACIONAL le regalan algo.

Su pierna izquierda esta marcada por una cicatriz, donde le dieron un balazo en el año 1997, cuando reclamaba que solucionaran su caso.

Cuando llego al país deportado el 14 de abril de 1986, fue despojado de 15 mil dólares, varias tarjetas de créditos, dos maletas conteniendo su ropa y numerosos efectos personales.

En el año de 1990 duro 10 día interno en el manicómio Padre Billini, donde le diagnosticaron delirio de persecución, pero que no representa peligrosidad ni para si ni para los demás.

Joseph fue dado de alta por los médicos psiquiatras Alejandro Acevedo Guzmán y Pablo Pascual Báez. De acuerdo al expediente numero 497229, el supuesto ciudadano holandés fue dado de alta “por no encontrar criterios para mantenerlo hospitalizado”.

Es una lastima que de este pobre hombre no se sepa nada, que a las autoridades de Migración no les importe el caso. Joseph parece decidido de una vez y para siempre a terminar con ese drama que se inicio aquel fatídico día 14 de abril del año 1986, cuando dos hombres de la seguridad holandesa lo arrojaron bruscamente en este apartado rincón del Caribe, abandonado a su propia suerte. Todavía estamos a tiempo de poder investigar la verdadera nacionalidad de Joseph Rosario.

Cuando el merengue es un adefesio














Tulile, Malafe, Julián y Omega son “merengueros” de esta época a los cuales hay que reconocerles que han pegado un estilo musical diferente. Su música pone a vibrar y a menear el cuerpo aunque usted no quiera. Son estilos musicales pasajeros, donde predomina la repetidera de un estribillo. ¿Saben estos muchachos cuando un merengue es malo? Creo que no, porque mientras ellos no entiendan que las canciones malas son aquellas que tienen deficiencia en las letras o en la música, seguirán componiendo adefesios musicales.

POR JUAN CARLOS NAVARRO

¿Qué es deficiencia en las letras de una canción? Cuando el lenguaje escrito no transmite claramente ideas ni conceptos, porque lo transmite erróneamente y en forma desorganizada.

Muchos merengueros de esta generación, los cuales están componiendo música desagradable, tienen que entender que una música es mala cuando no tiene armonía entre si, cuando los elementos básicos no permiten una emoción estética.

A estos nuevos merengueros de calle o de mambo hay que explicarles que toda canción, para que sea buena tiene que tener música que transmita sentimiento y letras que transmitan conceptos.

Claro esta que hay algunos compositores de merengue a los cuales no le interesa la calidad de su producción, sino si su producción dejará o no dinero.

Es cierto que muchas canciones que son malísimas se pegan porque tiene una melodía muy simple, porque son escasas de letras y porque las suenen con la payola en las emisoras de radio.

Las personas que gustan de esa música viven dentro de una forma de pensamiento liviana, que no ponen reparos ni a las letras ni a la música, sino que busca la pegadera de un estribillo, de una parte musical, que al repetirse se convierte en algo reiterativo y llama la atención. Ejemplo las canciones de Julián, Omega y Tulile entre otros.

Apuesto “peso a cabo e tubano” que estos ritmos musicales serán pasajeros. Recordemos cuando salio el merengue “La Tanguita Roja”, de la agrupación musical “Oro Sólido”, quienes fueron victimas de cientos de comentarios por tal merengue.

Y ahora ¿Dónde esta esa agrupación? También es el caso de Nelson Mendoza, líder de la agrupación “La Banda Chula”, que popularizó los merengues “ay que olla” y “Pirulo” este ultimo prohibido por la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos.

Ellos desaparecieron, ya no suenan en la radio. A estos lo relevaron Malafe, Tulile, Omega entre otros, quienes llevan el mismo trayecto de fracaso. La nueva “generación” del merengue están componiendo canciones con un doble sentido burdo y tosco, nunca van a entender que el doble sentido significa decir algo que no significa lo que se esta diciendo, sino algo supuesto. Las canciones de doble sentido toca la parte morbosa del ser humano, que a cada cosa le tiene un nombre real y donde todo es interpretativo. Lo que existe es una intención de que se piense en el lenguaje figurado.

Por este tipo de merengue es que la salsa y la bachata le han robado el espacio que tenia ganado el merengue. Hoy ya vemos como reconocidos merengueros, en cada una de sus producciones, graban una bachata o salsa. Ellos han entendido que la bachata rompió el el cerco social que la dividía y por la calidad de sus letras aventaja al merengue con varios puntos.

LUIS AMIAMA 40 AÑOS ANIMANDO LO INANIMADO






Un taxidermista es un artista, aquel que trata de mantener vivos los recuerdos, ofreciendo animales casi reales para que sean apreciados por siempre.


Por JUAN CARLOS NAVARRO
REPORTAJE ESPECIAL

Existen auténticos artistas capaces de mantener vivo a un animal doméstico o salvaje. Una de estas personas es Luis Amiama, dedicado al oficio de taxidermista durante cuarenta años. Dicha ocupación es difícil porque se requiere una gran habilidad y dominio técnico, ya que la improvisación se observa en los resultados finales. Amiama comenta: “Uno debe saber de músculos, dientes, huesos; en una palabra, la anatomía completa del animal”.

En nuestro país la taxidermia aún no es una carrera universitaria. En la actualidad don Luis es el taxidermista de planta del Museo de Historia Natural, donde todo lo que hay lo ha realizado el. Según sus afirmaciones es el único profesional que realiza este oficio en el país.

Amiama aprendió la taxidermia en la escuela de taxidermia Jungla, de Madrid España. Ahí también trabajaba en coordinación con el zoológico de esa ciudad. Al regresar a Republica Dominicana siguió con este oficio, en el que ha estado por 40 años.

La taxidermia es una de las labores más antiguas que existen, se cree que comenzó a practicarse en Egipto hacia el año 4 mil a.C. y ha ido evolucionando con el paso de los siglos. La etimología de la palabra taxidermia proviene del término taxi, cuyo significado en griego es cortar, y dermia, que en latín significa piel.

LABORIOSO ARTE

La habilidad de hacer una escultura anatómica con un animal no es tarea fácil, no sólo por estar cerca de cadáveres, sino porque toma horas y días de trabajo. Las manos de Amiama muestran el constante contacto con químicos e instrumentos filosos usados para limpiar las pieles, al grado de estar perdiendo la sensibilidad en los dedos; quizá por eso digan que quien se dedica a esta profesión debe vivirla en cuerpo y mente.

ALGO MÁS
Don Luis Amiama ha representado a Republica Dominicana en diferentes exposiciones nacionales y extranjeras. Sus obra se encuentra en el Museo de Historia y Natural. También en las casas y villas de veraneo de muchas celebridades dominicanas y extranjera que lo buscan para hacer este trabajo

El rey de la selva es la criatura más difícil de momificar, “por tener muchos movimientos en el cuerpo y una expresión feroz y agresiva; todo esto debe reflejarse en la obra terminada”, indica el taxidermista.

Amiama ha estudiado la forma anatómica de cada animal que ha preparado. “Me ayudo con videos para ver el comportamiento y posiciones que tienen en la vida natural”, explica, dando a entender que quien se dedica a esta labor debe ser conocedor y amante de la naturaleza en general y en especial de los animales.

El taxidermista también es escultor, pues elabora un molde anatómico del animal, en donde recrea los movimientos de los músculos y da un aspecto saludable, éste sirve para elaborar la estructura de fibra de vidrio y metal en donde se monta la piel. Además es pintor, sumamente habilidoso y cuidadoso en cada detalle.

Las disecaciones de cabezas, por ejemplo, se hacen con materiales ligeros, para ser colgadas en las paredes sin ningún problema. Los cuerpos completos están construidos con una estructura de metal, la cual llega a resistir hasta 400 libras.


Gatos, perros o cualquier otro animal doméstico pueden acompañar a sus dueños por largo tiempo después de muertos. Siempre y cuando sean de las manos del más afamado taxidermista nacional e internacional ya que sus obras han llegado a territorios internacionales dándole fama y prestigio a su oficio, pero sobre todo a nuestro país.